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Las estadísticas muestran que, en algún momento de la vida, casi todas las personas consideran hacerse un tatuaje. Lamentablemente, no todo el mundo puede decorar su cuerpo con tinta de forma segura. El tatuaje es un procedimiento invasivo en el que se rompe intencionadamente la integridad de la piel.
Por esta razón, el cuerpo impone una serie de restricciones relacionadas con la salud, que se dividen en dos grupos: contraindicaciones crónicas y contraindicaciones temporales.
Contraindicaciones crónicas para hacerse un tatuaje
Las contraindicaciones crónicas incluyen cualquier condición que implique:
Trastornos de la coagulación sanguínea: hemofilia, trombocitopenia, fibrinopenia. Estas enfermedades conllevan un alto riesgo de hemorragias difíciles de detener. Posibles complicaciones durante una sesión:
- Una gran parte del pigmento puede eliminarse con la sangre, reduciendo la calidad del tatuaje.
- El artista debe trabajar “a ciegas” entre la sangre, lo que aumenta el riesgo de errores y traumatismos.
- Existe un riesgo real de pérdida severa de sangre.
Es obligatoria una consulta previa con un hematólogo o su médico de cabecera antes de tatuarse.

Diabetes tipo 1 insulinodependiente o tipo 2 grave y mal controlada.
- La regeneración lenta de los tejidos puede provocar una curación prolongada y problemática (hasta 2 meses).
- El dolor y el estrés pueden provocar picos peligrosos en los niveles de azúcar en sangre.
El tatuaje solo está permitido cuando los niveles de glucosa son estables y con la aprobación del endocrinólogo.
Cáncer o estados posteriores al cáncer (incluidos después de quimioterapia o radioterapia).
El sistema inmunológico está debilitado, el riesgo de infección es alto y la cicatrización es difícil. Solo se permite tatuarse con autorización escrita del oncólogo.
Infecciones virales graves como VIH, SIDA, hepatitis B/C, sífilis. Es esencial estar en remisión prolongada y contar con la aprobación médica.
Enfermedades graves de la piel: psoriasis, eccema, rosácea, vitiligo, esclerodermia.
Está contraindicado tatuar sobre lesiones activas. Puede considerarse durante una remisión prolongada, pero con precaución.
Hipertensión crónica y enfermedades cardiovasculares.
El estrés del procedimiento puede desencadenar una crisis hipertensiva. Consulte primero a un cardiólogo.
Enfermedades autoinmunes: lupus, enfermedad de Crohn, artritis reumatoide.
El sistema inmunológico está debilitado o inestable, lo que aumenta el riesgo de complicaciones. Solo se permite tatuarse con la aprobación de un inmunólogo.
Uso de medicamentos potentes: esteroides, inmunosupresores, anticoagulantes.
Estos medicamentos afectan la curación y la coagulación. Tatuarse solo está permitido tras consultar los riesgos con su médico.
Todas las condiciones mencionadas requieren una autorización médica formal. La opinión del médico siempre tiene más peso que la recomendación del tatuador.
Contraindicaciones temporales para hacerse un tatuaje
Se trata de condiciones a corto plazo en las que el cuerpo está debilitado y no está preparado para un estrés adicional:
- Infecciones virales agudas: resfriados, gripe, COVID-19, etc.
- Fiebre o temperatura corporal elevada.
- Brotes alérgicos (especialmente erupciones cutáneas).
- Inmunodeficiencia posterior a enfermedad o vacunación (espere al menos dos semanas).
- Accidente cerebrovascular o cirugía reciente.
- Lesiones en la piel en la zona donde se desea tatuar.
- Intoxicación por alcohol o drogas.
- Embarazo, lactancia y menstruación.
- Agotamiento mental o emocional, depresión, ataques de pánico.

Las contraindicaciones temporales a menudo se ignoran. Recuerde: un tatuaje es una lesión. Su cuerpo debe tener suficientes recursos para recuperarse, de lo contrario, pueden surgir complicaciones, curación lenta y distorsión del color.
Notas adicionales
Si se ha vacunado recientemente (incluida la del COVID-19), espere al menos 14 días. Su sistema inmunológico necesita tiempo para recuperarse.
Si tiene dudas, consulte a su médico. Es mejor posponer una sesión una semana que tratar complicaciones durante meses.
¡Cuide su salud y respete su cuerpo!
Preguntas frecuentes
¿Se puede tatuar una persona con diabetes?
Sí, si la diabetes está bien controlada. La cicatrización será más lenta; controle los niveles de glucosa junto con su endocrinólogo.
¿Cuánto tiempo debo esperar después del COVID-19 o una vacunación?
Espere al menos 14 días después de la recuperación o la vacunación para que su sistema inmunológico se estabilice.
¿Qué pasa con las enfermedades autoinmunes?
Solo con autorización de un reumatólogo o inmunólogo; evite tatuarse durante los brotes activos.
¿Y los anticoagulantes?
Solo si su médico ajusta temporalmente la medicación; de lo contrario, el riesgo de sangrado es demasiado alto.
¿Crónico o temporal?
Las condiciones crónicas requieren seguimiento médico constante; las temporales (como un resfriado) desaparecen, y se puede tatuar después.
¿Tatuajes durante el embarazo?
No. Debido al riesgo de infección y a los cambios inmunológicos, espere hasta después del embarazo y la lactancia.
¿Tatuarse con resfriado?
No. Con una infección respiratoria o fiebre, su sistema inmunológico está comprometido y hay mayor riesgo de complicaciones.
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